El grupo municipal asegura que esta medida dificultaría la gestión de los centros y perjudicaría las finanzas del Ayuntamiento.

El Grupo parlamentario socialista en Les Corts ha mantenido un encuentro con representantes de cerca de 50 municipios que cuentan con residencias públicas y que a partir del 1 de enero se verán afectados por la nueva normativa de gestión implantada por la Generalitat. Una medida que supone que será el Consell quien ingrese directamente las aportaciones de los usuarios y no los ayuntamientos como hasta ahora.

El grupo municipal socialista en Benicarló ha insistido en que “la Generalitat tiene graves problemas económicos, especialmente en la conselleria de Bienestar Social, y ahora pretende que los ayuntamientos y empresas gestoras de estos servicios la financien a toda costa, sin plantearse que los retrasos en los pagos pueden hacer peligrar los distintos centros”.

Benicarló cuenta en la actualidad con cinco centros públicos que se verán afectados por esta medida lo que “pone contras las cuerdas nuestra ciudad”, según ha explicado la concejal socialista Filo Agut.

Hay que recordar que las aportaciones de los usuarios de estos centros eran recaudadas por los ayuntamientos al ser los titulares de las residencias, y con ello hacían frente al pago de los partidas más urgentes como las nóminas de los trabajadores, pago a proveedores etc. “ afrontando así el retraso en el pago de las subvenciones por parte de la Generalitat”.

Filo Agut ha afirmado que el nuevo sistema de pago afecta a servicios que son básicos y ha agregado que “una vez más  el Consell aprueba medidas insolidarias, no solo para los mayores y el colectivo de dependientes sino también para las administraciones locales que ahora se verán ahogadas al tener que afrontar gastos sin la garantía de cobro”.